Su primera vez en mi cama y en mi mente gritaba
¡Otra oportunidad!
¡Otra oportunidad!
¡Otra oportunidad!
¡Otra oportunidad!
¡Otra oportunidad!
(me gusta tanto por eso valió madre saber que el intento fallido terminaría en el clásico
"se sube 1,2,3 y se fueeeeee")
Recordé aquel día en la universidad en que prendí el boiler y no me metí a bañar; me dije "ah mi chulo, se merece otro chance después del dolor de huevos con que lo deje aquella noche"
Todos merecemos una segunda oportunidad (pero ¿una tercera? o ¿cuarta?)
(Round 2)
¿Seré yo que no me suelto? o ¿será que esto no es lo suyo?...
(pero me gusta tanto, si a la tercera resulta un fiasco enserio nomás no lo vuelvo ver - pero eso sí me cae que por mi no queda-)
(Round 3)
Ring!
Ring!
Ring!
Tercer round a dos de tres caídas sin limite de tiempo.
A que diferencia, esto si esta bueno...
(ahora sí, valió la pena dar segunda y hasta tercera oportunidad)
... ya lo que sigue es por deporte...
Suelo ser muy curiosa y no me quise quedar con la duda, prefiero una y mil veces arrepentirme de lo que hago que de lo que dejo de hacer. Pido, doy, me han dado y he regalado segundas, terceras oportunidades, ni una más.
BY Dime Vaquera
No hay comentarios:
Publicar un comentario